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Encontrar la casa o el apartamento soñado es posiblemente uno de los momentos más felices en la vida de toda persona.  Sin embargo, en ese emocionante proceso que significa adquirir un inmueble surgen varios, por no decir muchos, interrogantes. ¿Has escuchado qué es el contrato de arras? ¿Cómo funciona o para qué sirve?

Y no, no nos referimos a las 13 monedas que los novios se intercambian en su matrimonio como símbolo de prosperidad para su nueva vida de casados, ¡no! En términos legales la Notaria 19 de Bogotá las define como: “Una especie de garantía que las partes acuerdan y, generalmente, consiste en la entrega de dinero, bien sea para confirmar un contrato, o bien como parte de indemnización para poder desistir del mismo”. 

Pero, ¿qué significa?

Es muy sencillo. Una vez te enamoras de ese lugar y te imaginas allí tomando café, decorando el arbolito de navidad o preparando tus recetas preferidas en familia… Este es el primer paso que se debería dar para adquirir el inmueble sin problemas ni contratiempos. ¿Son obligatorias? No. Sin embargo, expertos en el tema afirman que son un paso recomendable para asegurar la compra y conferirle certeza. Funcionan como una especie de garantía de que comprador y vendedor terminarán formalizando la transacción. 

¿Por qué valor deberían ser? 

Por lo general, representan un 10 % del valor del inmueble. Sin embargo, y teniendo en cuenta que el contrato de arras es un pacto libre, la cantidad pueden variar dependiendo de lo que se acuerde directamente con el vendedor. 

¿Qué tipo de arras existen? 

1. Confirmatorias: como prueba de la celebración del acuerdo, el comprador entrega una cantidad de dinero. Este valor será restado del precio final del inmueble. Si una parte incumple, la otra puede reclamar el cumplimiento del acuerdo, su resolución y una indemnización por daños y perjuicios”.

2. Penitenciales: cualquiera de las partes puede desistir del contrato. Si se trata del comprador, perderá la cantidad entregada. ¿Y el vendedor? Deberá devolver el doble de la cantidad que haya recibido.

3. Penales: tiene como objetivo garantizar el cumplimiento del contrato mediante su pérdida o devolución doblada, en caso de incumplimiento. El valor que se entrega por concepto de arras no hace parte del precio, sino que funciona como una cláusula penal.

¿Y cómo se hacen oficiales? 

Se puede elaborar un contrato de arras antes de realizar la promesa de compraventa. Este deberá incluir la siguiente información: 

• Datos personales de comprador y vendedor, con sus correspondientes documentos de identidad.
• Información de la vivienda como la ciudad en la que está ubicada, dirección, área total, si tiene depósito o garaje.
• Precio final por el que se va a adquirir el inmueble.
• Cantidad de dinero por concepto de las arras, especificando si este valor es descontado del precio final de la vivienda al momento de firmar la escritura
• Fecha máxima para formalizar la venta.
• Posibles cargas de la propiedad.
• Reparto de los gastos de compraventa

Además, y como segunda opción, esta información se podría incluir en la promesa de compraventa del inmueble.  Es importante tener en cuenta que las leyes y prácticas relacionadas con los contratos de arras pueden variar según el país o la región, por lo que es recomendable buscar asesoramiento legal antes de firmar este tipo de contrato.

Esperamos que con esta información hayamos aclarado muchas de tus dudas. 

Fuente: Ciencuadras