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Comprar vivienda es una de las decisiones más importantes y trascendentales, pues no solo se trata de elegir el lugar donde surgirán (y se cristalizarán) muchos sueños, sino que es una inversión significativa en la vida de toda persona.

Adquirir una vivienda es una decisión personal que se debe tomar analizando diversos factores. Aunque invertir en propiedad raíz es una de las inversiones que tienen menor riesgo, es fundamental revisar varios aspectos para tomar una decisión consciente y acertada.

Te contamos cinco señales que te indicarán que estás listo (a) para hacer esta inversión.

1. Tienes la mentalidad

Más allá del dinero, la capacidad de endeudamiento y los ahorros (que también son factores importantes), tienes la mentalidad de convertirte en propietario de tu propia vivienda. Esto significa estar abierto a que las cosas buenas lleguen, a disponer tu mente y tus esfuerzos para que esto suceda y a comprender que esta decisión va a generar varios cambios en tu vida.

2. Conoces tus finanzas

A la hora de realizar este tipo de inversiones tienes claro cómo están tus finanzas, por lo que conoces muy bien tus ingresos, tus deudas, tus ahorros… Considerar estos aspectos antes de iniciar el proceso de compra, te dará la tranquilidad que necesitas para tomar la decisión y te ahorrará futuros inconvenientes financieros.

3. Tienes una estabilidad financiera para comprar vivienda

Tienes claro que comprar vivienda es uno de tus sueños venideros, por lo que ya cuentas con los recursos económicos para lograrlo o tienes un plan de acción a corto, mediano o largo plazo para conseguirlos. Si se trata de un proyecto nuevo, este punto incluye tener los medios para pagar la cuota inicial (casi siempre es del 30%) y para después continuar pagando el crédito hipotecario. ¿Y en el caso de una vivienda usada? Tener la solvencia económica para hacer este tipo de inversión.

4. Calificas para un crédito 

Ya sea que optes por un crédito hipotecario, de libre inversión o por un leasing habitacional, tienes historial crediticio, una buena capacidad de pago y un adecuado soporte de ingresos demostrables con documentación, detalles importantes que analizan las entidades financieras. De estos factores depende no solo la aprobación del crédito, sino también características como la tasa, el tiempo de financiación, entre otros.

5. Sabes exactamente para qué quieres la vivienda

Para vivir, para arrendar, para vacacionar… Tienes claro cuál es el objetivo de la inversión, lo que te permitirá optimizar el proceso de búsqueda del inmueble y sus características.

6. Quieres comprar vivienda para tener más libertad

Luego de vivir varios años en casa de mamá o de convivir con un roomie por un buen tiempo, tienes claro que es momento de independizarte. Te encanta la idea de elegir el estilo de tu decoración y la ubicación de tus sueños… Si te sientes así, tal vez es momento de contemplar esta inversión.

La libertad personal de escoger estilos, diseños, colores, texturas y hasta su ubicación es un lujo que todos deseamos, por eso, si ya estas ansioso por más libertad, puede ser tu momento de algo de espacio.

Fuente: ciencuadras